Videolaringoscopios en Anestesia Obstétrica
byEn este trabajo se revisa la utilidad de los videolaringoscopios en el contexto de la anestesia general obstétrica.
En este trabajo se revisa la utilidad de los videolaringoscopios en el contexto de la anestesia general obstétrica.
La dificultad en el abordaje de la vía aérea difícil (VAD) puede tener importantes consecuencias clínicas para el paciente incluida la muerte. El ASA Closed Claims revela que el 34 % de las demandas a anestesistas se encuentran en relación a eventos de la vía aérea, y que la dificultad de intubación ha sido la causa más común de daño en las mismas desde los años 90. ¿Qué hay de nuevo?.
Desde que los videolaringoscopios aparecieran a finales del siglo pasado hasta hoy es imposible saber cuántas intubaciones se llevan diariamente a cabo empleando videolaringoscopios.
Presentamos una editorial en la que los autores se preguntan, si la intubación con videolaringoscopios parece ser más sencilla y segura, y además existe la posibilidad de grabar el procedimiento, ¿por qué no los usamos de entrada en un intento de mejorar la seguridad de nuestros pacientes?
Vamos a comentar con un pequeño resumen los artículos que nos han parecido más interesantes publicados en AnestesiaR en el año 2014.
Esta es una iniciativa que llevamos haciendo desde hace 3 años, es una apreciación puramente subjetiva, considerando los artículos que más nos han aportado para nuestra práctica clínica.
El manejo de la vía aérea (VA) del paciente no intubable no ventilable (NI-NV) constituye una situación dramática a la que el anestesista debe dar respuesta. La ASA en sus últimas recomendaciones indica la realización de un abordaje invasivo sobre la VA como modo de evitar la muerte por fracaso de intubación.
El examen de la vía aérea es una de las tareas fundamentales de la exploración prequirúrgica del anestesiólogo, existiendo en la actualidad muchos métodos que intentan predecir la existencia de una Vía Aérea Difícil (VAD).
En este artículo se intenta comprobar la hipótesis de si la imposibilidad de ver el hueso hioides con una ecografía sublingual se correlaciona con una laringoscopia difícil y, por extensión, con una intubación difícil.