Actualización de Analgesia epidural para el trabajo de parto.
El dolor del trabajo de parto produce no sólo sufrimiento emocional sino alteraciones fisiológicas que afectan a la madre y al feto tales como: hiperventilación, alcalosis respiratoria severa aumento de catecolaminas y hormonas de estrés, hipoxia feto-placentaria y acidosis fetal y alteraciones psicológicas y estrés postraumático.
Actualmente, la anestesia neuroaxial y más concretamente la analgesia epidural es la principal recomendación como método farmacológico de analgesia en el trabajo de parto. Nos hemos centrado principalmente en dos métodos de infusión. Por un lado, el tradicional, de infusión continua de anestésico local por el catéter epidural (CEI) más bolos de analgesia epidural controlada por el paciente (PCEA) y por otro; epidural con bolos intermitentes programados: (PIEB) que es un método de infusión de fármacos en el espacio epidural que consiste en la administración de bolos fijos en intervalos determinados.