Gestión perioperatoria de pacientes con dispositivos electrónicos implantables cardiacos

Desde la implantación del primer marcapasos endocárdico asincrónico por Furman y Robinson en 1958 el periodo perioperatorio de los pacientes con marcapasos y desfibriladores automáticos implantables a menudo ha supuesto un desafí­o para los sistemas sanitarios. Cada vez es más frecuente que el especialista en Anestesiologí­a y Cuidados Crí­ticos se encuentre con pacientes portadores de dispositivos electrónicos implantables cardiacos.

Taquiarritmia grave en la unidad de reanimación en paciente portador de tubo orotraqueal herniado de manera inadvertida

La mala posición del tubo orotraqueal (TOT) es una complicación que aparece en el 12 al 15% de las intubaciones realizadas en la Unidad de Cuidados Crí­ticos. El bisel del tubo orotraqueal debe estar ubicado 4 a 5 cm por encima de la carina, equivalente al nivel de la tercera o cuarta vértebra dorsal. Debe documentarse la profundidad de la inserción, distancia en centí­metros a nivel del incisivo superior o a nivel de los labios en paciente sin dientes. También, una vez colocado, se debe marcar el TOT, preferentemente, a nivel del incisivo superior o en su defecto, a nivel de los labios para tener idea de la profundidad correcta del mismo.

Manejo de Ví­a Aérea en pacientes con Obesidad Mórbida

Los predictores de ví­a aérea difí­cil (VAD) de la Sociedad Americana de Anestesiologí­a (ASA) con frecuencia subestiman el diagnóstico de VAD en pacientes con obesidad mórbida. Los obesos se diferencian, no sólo en la ví­a aérea externa, sino también en la anatomí­a de la orofaringe y laringe. Por eso, la VAD no prevista es tres veces más frecuente que en otros pacientes. Datos de la ASA muestran que estos pacientes sufren un 37% de complicaciones en la ví­a aérea durante la inducción. Un análisis retrospectivo de 2,9 millones de pacientes de Cook et al mostró que la obesidad está relacionada con un 40% de complicaciones de ví­a aérea durante la anestesia general (1).

Comparativa entre el Glidescope y el laringoscopio de Macintosh para la intubación con tubos de doble luz

Existen muchos estudios que documentan seguridad y alto porcentaje de éxito de intubación al primer intento con el GLD en pacientes con ví­a aérea normal o difí­cil.
En este, los autores comparan el Glidescope y el laringoscopio de Macintosh para la intubación con tubos de doble luz izquierdos en cirugí­as que precisaban aislamiento pulmonar en pacientes en los que no se predice de ví­a aérea difí­cil.

Actualizamos las normas de publicación y lanzamos un nuevo número de la ReAR

El Consejo de redacción de la Revista Electrónica de Anestesiologí­a y Reanimación (ReaR) acordó en su primera reunión de 2014 la actualización de las normas de publicación con el objetivo de optimizar el proceso editorial y de facilitar el trabajo de los autores potenciales. Por otra parte, como todos los meses, anunciamos que está accesible libremente el número de Marzo de la Revista electrónica de AnestesiaR (ReAR) y el número correspondiente a Mayo ya está disponible para los suscriptores.